Archivo | letransfusión RSS feed for this section

El mendigo – Felipe J. Perez

2 Mar

Una de las cosas que suceden a menudo en este blog es que al pasar por aquí, hay quienes buscan poemas que les recitaban sus padres, abuelos, seres queridos y también los que han escuchado por ahí y que no tuvieron oportunidad de saber quién era el autor o que simplemente han olvidado.

Este es el caso, en el 2010 Mariela (sólo dejo su nombre https://letransfusion.wordpress.com/2008/02/25/reir-llorando-garrick-juan-de-dios-peza/#comment-2519) comentó que buscaba un poema y por aquellos años no lo pude encontrar, ha pasado el tiempo y Leonardo lo mismo que Mariela recuerda un fragmento del poema, por ello googleando un poco encontré esta publicación: http://abuelas.obolog.es/poema-anciano-79215. En los comentarios aparece lo que sería el poema completo:

El mendigo (1890)

«Un infeliz pordiosero,
bajo el puente reclinado
descansaba fatigado
de tanto pedir y andar.
Un joven que iba de prisa
tropezó con el anciano
y le arrancó de la mano
su garrote y su morral.
Volvió la vista y como era
un infeliz sin fortuna
no tuvo pena ninguna
del daño que le causó.
-¡Anda! le dijo el anciano
que si llegas a mis años,
otro te hará iguales daños
y no tendrá compasión.
Se acaba la primavera
pasa el calor del estío
y llega el invierno frío
a quitarnos el vigor.
Se hielan las amistades
se deshace la riqueza
y el que pasa nos tropieza
y no nos pide perdón.
A la voz del viejo, el joven
volvióse y dijo apenado:
Dispensad, he tropezado
porque al pasar no os miré-
A tu edad nada se mira,
joven, porque nada importa
¡cuando la vida se acorta
es que se comienza a ver!

Felipe J. Pérez

Jorge López, quien dejó el poema, comenta:

La Poesìa està en el libro de lectura para la escuela primaria llamado VIDA… lo usò mi mamà en 1917 ò 1918… yo tengo 70 años, gracias por recordarmela. el Libro es de Josè Figueira de editorial Cabaut, la ùltima ediciòn que conozco es de 1937.
Jorge

 

La ejecución – Hermann Hesse

28 Jul

La ejecución

Hermann Hesse

En su peregrinación, el maestro y algunos de sus discípulos bajaron de la montaña al llano y se encaminaron hacia las murallas de la gran ciudad. Ante la puerta se había congregado una gran muchedumbre. Cuando se hallaron más cerca vieron un cadalso levantado y los verdugos ocupados en llevar a rastras hacia el tajo a un individuo ya muy debilitado por el calabozo y los tormentos. La plebe se agolpaba alrededor del espectáculo. Hacían mofa del reo y le escupían, movían bulla y esperaban con impaciencia la decapitación.

-¿Quién será y qué delitos habrá perpetrado -se preguntaban unos a otros los discípulos- para que la multitud desee su muerte con tanto afán? Aquí no se ve a nadie que manifieste compasión ni que llore.

-Supongo que será un hereje -dijo el maestro con tristeza.

Siguieron acercándose, y cuando se vieron confundidos con el gentío los discípulos preguntaron a izquierda y derecha quién era y qué crímenes había cometido el que en aquellos momentos se arrodillaba frente al tajo.

-Es un hereje -decía la gente muy indignada-. ¡Hola! ¡Ahora inclina su cabeza condenada! ¡Acabemos de una vez! En verdad ese perro quiso enseñarnos que la ciudad del Paraíso tiene sólo dos puertas, ¡cuando a todos nosotros nos consta perfectamente que las puertas son doce!

Asombrados, los discípulos se reunieron alrededor del maestro y le preguntaron:

-¿Cómo lo adivinaste, maestro?

Él sonrió y, mientras echaba de nuevo a andar, dijo en voz baja:

-No ha sido difícil. Si fuese un asesino, o un bandolero o cualquier otra especie de criminal, habríamos visto entre las gentes del pueblo pena y compasión. Muchos llorarían y algunos hasta pondrían el grito en el cielo proclamando su inocencia. Al que tiene una creencia diferente, en cambio, se le puede sacrificar y echar su cadáver a los perros sin que el pueblo se inmute.


Aquí lo puedes descargar en PDF:
https://drive.google.com/file/d/0B3qMrxnKJ_HKendYajFUZzFKUjg/view?usp=sharing

 

Ver «Varios cuentos» en YouTube

14 Mar

Fragmento de la presentación del libro «Nadie se va todos están aquí» del escritor Alfredo Blancas.

Narración de los cuentos sufíes: «Buena o mala suerte», «Sólo quiero aire», «La opinión de los demás», un cuento de Chuang Tzu «El sueño de la mariposa», un poema que se le atribuyó erróneamente a Jorge Luis Borges «Instantes», un cuento de Rumi «Tres consejos» y finalmente un cuento de Augusto Monterroso «La honda de David».

«Lo que sucedió a una mujer llamada Doña Truhana»

9 Feb

Esta entrada fue publicada hace siete años (09/12/2008 04: 24). Hoy la actualizo como parte del trabajo de reconstrucción de éste proyecto: Letransfusión.

Ahora les traigo el más reciente cuento que estoy llevando a los vagones del metro. Ojalá sea de su agrado:

Lo que sucedió a una mujer que se llamaba doña Truhana

Otra vez estaba hablando el Conde Lucanor con Patronio de esta manera:

-Patronio, un hombre me ha propuesto una cosa y también me ha dicho la forma de conseguirla. Os aseguro que tiene tantas ventajas que, si con la ayuda de Dios pudiera salir bien, me sería de gran utilidad y provecho, pues los beneficios se ligan unos con otros, de tal forma que al final serán muy grandes.

Y entonces le contó a Patronio cuanto él sabía. Al oírlo Patronio, contestó al conde:

-Señor Conde Lucanor, siempre oí decir que el prudente se atiene a las realidades y desdeña las fantasías, pues muchas veces a quienes viven de ellas les suele ocurrir lo que a doña Truhana.

El conde le preguntó lo que le había pasado a esta.

-Señor conde -dijo Patronio-, había una mujer que se llamaba doña Truhana, que era más pobre que rica, la cual, yendo un día al mercado, llevaba una olla de miel en la cabeza. Mientras iba por el camino, empezó a pensar que vendería la miel y que, con lo que le diesen, compraría una partida de huevos, de los cuales nacerían gallinas, y que luego, con el dinero que le diesen por las gallinas, compraría ovejas, y así fue comprando y vendiendo, siempre con ganancias, hasta que se vio más rica que ninguna de sus vecinas.

»Luego pensó que, siendo tan rica, podría casar bien a sus hijos e hijas, y que iría acompañada por la calle de yernos y nueras y, pensó también que todos comentarían su buena suerte pues había llegado a tener tantos bienes aunque había nacido muy pobre.

»Así, pensando en esto, comenzó a reír con mucha alegría por su buena suerte y, riendo, riendo, se dio una palmada en la frente, la olla cayó al suelo y se rompió en mil pedazos. Doña Truhana, cuando vio la olla rota y la miel esparcida por el suelo, empezó a llorar y a lamentarse muy amargamente porque había perdido todas las riquezas que esperaba obtener de la olla si no se hubiera roto. Así, porque puso toda su confianza en fantasías, no pudo hacer nada de lo que esperaba y deseaba tanto.

»Vos, señor conde, si queréis que lo que os dicen y lo que pensáis sean realidad algún día, procurad siempre que se trate de cosas razonables y no fantasías o imaginaciones dudosas y vanas. Y cuando quisiereis iniciar algún negocio, no arriesguéis algo muy vuestro, cuya pérdida os pueda ocasionar dolor, por conseguir un provecho basado tan sólo en la imaginación.

Al conde le agradó mucho esto que le contó Patronio, actuó de acuerdo con la historia y, así, le fue muy bien.

Y como a don Juan le gustó este cuento, lo hizo escribir en este libro y compuso estos versos:

En realidades ciertas os podéis confiar,
mas de las fantasías os debéis alejar.

FIN

Aquí el PDF para que lo impriman, compartan y recuerden que esta hoja es un esfuerzo por fomentar el gusto por la palabra escrita y difundir el conocimiento en nuestro pueblo. Si consideras importante este hecho, te invito a que hagas copias y las distribuyas. Si haces diez copias y quienes reciban una hacen otras tantas: pronto habrá más lectores.

Gracias.

https://drive.google.com/file/d/0B3qMrxnKJ_HKX0ZtRWVfbUtzakE/view?usp=sharing

Buena o mala suerte

2 Feb

Buena o mala suerte
Cuento Sufi

Había una vez un hombre que vivía con su hijo en una casa del campo, tenían un caballo para la labranza y para cargar los productos de la cosecha, así que el caballo era su bien más preciado.

Un día el caballo escapó saltando por encima de las cercas del corral. El vecino al percatarse de este hecho fue corriendo hasta las puertas del hombre diciendo:

-Tu caballo se escapó ¿qué harás ahora para trabajar el campo sin él? Se te avecina un invierno muy duro, ¡qué mala suerte has tenido!

El hombre lo miró y le dijo:

-¿Mala o buena suerte? Sólo Alá lo sabe.

Pasaron algunos días y el caballo volvió a su corral con diez caballos salvajes que se le habían unido en su aventura. El vecino que estaba al tanto fue a verlo y le dijo:

-No sólo recuperaste tu caballo, sino que ahora tienes diez más. Podrás vender y criar, ¡qué buena suerte has tenido.

-¿Buena o mala suerte? Sólo Alá lo sabe.

Un día, el hijo del hombre montaba a uno de los caballos salvajes para domarlo, pero cayó del caballo y se rompió una pierna. Otra vez el vecino fue a verlo y le dijo:

-Tu hijo se accidentó y ya no podrá ayudarte, tú eres muy viejo y no podrás solo con los trabajos del campo, ¡qué mala suerte has tenido!

-¿Mala o buena suerte? Sólo Alá lo sabe.

Pasó el tiempo y en aquél país estalló la guerra con el país vecino, entonces el ejército iba por los campos reclutando a los jóvenes para llevarlos al campo de batalla. Al hijo del vecino se lo llevaron por estar sano y al del hombre lo dejaron por estar imposibilitado. El vecino fue corriendo a decirle:

-Se llevaron a mi hijo por estar sano y al tuyo lo dejaron por su pierna rota, ¡qué buena suerte la suya! ¡Qué mala suerte la nuestra!

-¿Buena o mala suerte? Sólo Alá lo sabe.

FIN

El cuento pudo extenderse infinitamente hasta que el vecino comprendiera que la buena o la mala suerte no existen y para resumirlo en un dicho muy popular, “no hay mal que por bien no venga” o, ¿no hay bien que por mal no venga?

Nada es bueno, nada es malo, ¿quién se atrevería a cuestionar al Todo?

Enlace para descarga:

https://drive.google.com/file/d/0B3qMrxnKJ_HKWVpmWHZRLXpPSVE/view?usp=sharing

Un hombre, su caballo y su perro

19 Ene

Un hombre, su caballo, su perro y el cielo
Anónimo

Un hombre, su caballo y su perro iban por un camino. Luego de mucho andar el caminante se dio cuenta de que los tres ya habían muerto en un accidente.

Hay veces que lleva un tiempo para que los muertos se den cuenta de su nueva condición. La caminata era larga, cuesta arriba. El sol era fuerte y los tres estaban empapados en sudor y con mucha sed. Precisaban desesperadamente agua. En una curva del camino, avistaron un portón magnífico, todo de mármol, que conducía a una plaza calzada con bloques de oro, en el centro de la cual había una fuente de donde brotaba agua cristalina. El caminante se dirigió al hombre que desde una garita cuidaba de la entrada.
-Buen día -dijo el caminante.

-Buen día -respondió el hombre.

-¿Qué lugar es este, tan hermoso? -preguntó el caminante.

-Esto es el cielo -fue la respuesta.

-Qué bueno que llegamos al cielo, estamos con mucha sed -dijo el caminante.

-Usted puede entrar a beber toda el agua que desee -dijo el guardián, indicándole la fuente.

-Mi caballo y mi perro también están con sed.

-Lo lamento mucho -le dijo el guarda-. En este sitio está prohibida la entrada de animales.

El hombre se sintió profundamente decepcionado pues aunque era grande su sed, él no bebería ni una gota si sus amigos no podían hacerlo. Así que siguieron su camino cuesta arriba. Luego de mucho andar con el cansancio y la sed multiplicados dieron con otro sitio cuya entrada estaba marcada por un portón viejo entreabierto. El portón daba a un camino de tierra, con árboles a los lados que le hacían sombra. Debajo de uno de los árboles, un hombre estaba recostado, con la cabeza cubierta por un sombrero; parecía que dormía…

-Buen día -dijo el caminante.

-Buen día -respondió el hombre.

-Mis amigos y yo venimos con mucha sed.

El viejo les señaló una fuente natural que brotaba de entre unas piedras y les dijo que allí podían beber toda la que desearan.
El hombre, el caballo y el perro fueron hasta la fuente y saciaron su sed.

-Muchas gracias -dijo el caminante al salir.

-Vuelvan cuando quieran -respondió el hombre.

-A propósito -dijo el caminante- ¿qué lugar es éste tan agradable?

-Este es el cielo -respondió el hombre.

-¿Cómo? ¡Pero si el vigilante del portón de mármol nos ha dicho que allí es el cielo!

-Aquello no es el cielo sino el infierno.

-Pues qué grandes confusiones debe causar tal engaño.

-Todo lo contrario amigo, pues allí van quedando los que engañados por su ambición y deslumbrados por el brillo del oro: son capaces de abandonar a sus mejores amigos.

FIN

Hoja para descarga:

https://drive.google.com/file/d/0B3qMrxnKJ_HKTVR4dUNCUHJydzQ/view?usp=sharing

La sociedad de los poetas muertos

30 Dic
Ahora que estoy retomando el blog, también estaré reciclando las entradas y esta es la primera que se va al inicio. Originalmente fue publicada el 2 de abril del 2008.
También dejo aquí la hoja para su descarga:
Este poema se suma a uno más de los que hasta el momento no se sabe quién es el verdadero autor. He recibido un par de correos de Leandro Wolfson a quien se atribuía la traducción, pero él mismo me ha hecho la aclaración de que no es un trabajo ni de Whitman ni de él e ignora quién es el autor. Por tal motivo hago esta aclaración. «No te detengas» es el poema que se ha convertido en mi mantra personal. Este poema también es conocido como «La sociedad de los poetas muertos» pues contiene frases que hacen suponer que se debe a la película que lleva ese título  (Dead Poets Society), el filme ganó un Oscar por mejor guión en 1990. Ojalá que a ti también te guste el poema.
No te detengas
No dejes que termine el día sin haber crecido un poco,
sin haber sido feliz, sin haber aumentado tus sueños.
No te dejes vencer por el desaliento.
No permitas que nadie te quite el derecho a expresarte,
que es casi un deber.
No abandones las ansias de hacer de tu vida algo extraordinario.
No dejes de creer que las palabras y las poesías
sí pueden cambiar el mundo.
Pase lo que pase nuestra esencia está intacta.
Somos seres llenos de pasión.
La vida es desierto y oasis.
Nos derriba, nos lastima,
nos enseña,
nos convierte en protagonistas
de nuestra propia historia.
Aunque el viento sople en contra,
la poderosa obra continúa:
Tu puedes aportar una estrofa.
No dejes nunca de soñar,
porque en sueños es libre el hombre.
No caigas en el peor de los errores:
el silencio.
La mayoría vive en un silencio espantoso.
No te resignes.
Huye.
«Emito mis alaridos por los techos de este mundo»,
dice el poeta.
Valora la belleza de las cosas simples.
Se puede hacer bella poesía sobre pequeñas cosas,
pero no podemos remar en contra de nosotros mismos.
Eso transforma la vida en un infierno.
Disfruta del pánico que te provoca
tener la vida por delante.
Vívela intensamente,
sin mediocridad.
Piensa que en ti está el futuro
y encara la tarea con orgullo y sin miedo.
Aprende de quienes puedan enseñarte.
Las experiencias de quienes nos precedieron
de nuestros «poetas muertos»,
te ayudan a caminar por la vida
La sociedad de hoy somos nosotros:
Los «poetas vivos».
No permitas que la vida te pase a ti sin que la vivas …

::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::

Estamos buscando al verdadero autor! Si tienes información, te agradeceremos mucho la compartas.

Mudanza

22 Ago

Este blog ha empezado a cambiar de servicio y será el proceso poco a poco. De momento ya están listas las dos más recientes entradas en el nuevo blog:

Nervo, Borges, Cortázar y Garro

Bukowski, Lorca, Bradbury & Lovecraft

Semana dedicada a Bukowski, Lorca, Bradbury & Lovecraft.
Son mucho los que nacen y mueren todos los días, pero no todos son poetas o escritores, por eso aquí les hacemos un humilde homenaje a todos ellos. La semana empieza el domingo, no obstante aquí iniciamos cada lunes el recuerdo de los escritores que hayan nacido o fallecido hasta el próximo domingo. De entre todos ellos dedicaremos la semana a cuatro: Charles Bukowski, Federico García Lorca, Ray Bradbury y Howard Phillips Lovecraft.



Semana dedicada a Capote, Wells y Hesse

10 Ago

Esta semana tenemos a los siguientes autores:

Truman Capote (Nueva Orleans 1924 – Los Ángeles 1984) periodista y escritor estadounidense.

Dr. Atl (Guadalajara, Jalisco1875 – Ciudad de México 1964) pintor y escritor mexicano cuyo nombre real fue Gerardo Murillo.

Grazia o Grazzia Deledda (Nuoro, Cerdeña 1871 – Roma 1936) escritora italiana.

Sir Walter Scott (Edimburgo 1771 – Abbotsford 1832) escritor inglés.

Elias Canetti (Bulgaria 1905 – Zúrich 1994) escritor aleman.

H. G. Wells (Reino Unido 1866 – Londres 1946) escritor británico.

Thomas Mann (Lübeck 1875 – Zúrich 1955) escritor alemán.

José Lezama Lima (La Habana 1910 – 1976) escritor cubano.

Hermann Karl Hesse (Alemania 1877 – Suiza 1962) escritor, poeta, novelista y pintor suizo de origen alemán.

Y de todos ellos estaremos dedicando esta semana a Hermann Hesse, H. G. Wells y Truman Capote.

De Truman Capote encontré el siguiente relato breve:

Una navidad

PRIMERO, UN BREVE PREÁMBULO autobiográfico. Mi madre, mujer excepcionalmente inteligente, era la chica más guapa de Alabama. Todo el mundo lo decía, y era verdad. A los dieciséis años se casó con un hombre de negocios de veintiocho que provenía de una buena familia de Nueva Orleans. El matrimonio duró un año. Ella era demasiado joven tanto para ser madre como para ser esposa; era además demasiado ambiciosa: quería ir a la universidad para tener una carrera. De modo que dejó a su marido; y, por lo que a mí se refiere, me puso al cuidado de su numerosa familia de Alabama.

Seguir leyendo: http://www.elmundo.es/magazine/num165/textos/truman.html

De H. G. Wells:

EL PAIS DE LOS CIEGOS

A más de trescientas millas del Chimborazo y a cien de las nieves del Cotopaxi, en el territorio más inhóspito de los Andes ecuatoriales, se encuentra un misterioso valle de montaña, el País de los Ciegos, aislado del resto de los hombres. Hace muchos años, ese valle estaba tan abierto al mundo que los hombres podían alcanzar por fin sus uniformes praderas atravesando pavorosos barrancos y un helado desfiladero; y unos hombres lograron alcanzarlo de verdad, una o dos familias de mestizos peruanos que huían de la codicia y de la tiranía de un malvado gobernante español. Luego sobrevino la asombrosa erupción del Mindobamba, que sumió en las tinieblas durante diecisiete días a la ciudad de Quito, y el agua hirvió en Yaguachi y todos los peces muertos llegaron flotando hasta el mismo Guayaquil; por doquier, a lo largo de las pendientes del Pacífico, hubo derrumbamientos y deshielos veloces e inundaciones repentinas, y una ladera completa de la antigua cumbre del Arauca se desprendió, desplomándose con gran estruendo, aislando para siempre el País de los Ciegos de las pisadas exploradoras de los hombres. Pero uno de estos primeros pobladores se hallaba por azar al otro lado de los barrancos cuando el mundo se estremeció de un modo tan terrible, y se vio forzosamente obligado a olvidar a su esposa y a su hijo y a todos los amigos y pertenencias que había dejado allá arriba, y a empezar una nueva vida en el mundo inferior. Volvió a empezarla, pero enfermo; le sobrevino una ceguera y murió en las minas a causa de los malos tratos. Pero la historia que él contó engendró una leyenda que ha perdurado a lo largo de la cordillera de los Andes hasta nuestros días.

Seguir leyendo: http://es.wikisource.org/wiki/El_pa%C3%ADs_de_los_ciegos

De Hermann Hesse:
El lobo estepario (dos fragmentos)

«La mayor parte de los hombres no quieren nadar antes de saber ¿no es esto espiritual? y no quieren nadar, naturalmente! Han nacido para la tierra, no para el agua y, naturalmente, no quieren pensar, como que han sido creados para la vida no para pensar. Claro y el que piensa, el que hace del pensar lo principal ese podrá acaso llegar muy lejos en esto, pero ese precisamente ha confundido el agua con la tierra, y tarde o temprano se ahogara.»

“El hombre no es de ninguna manera un ser firme y duradero, es más bien un ensayo y una transición, no es otra cosa sino el puente estrecho y peligroso entre la naturaleza y el espíritu. Hacia el espíritu, hacia Dios, lo impulsa la determinación más íntima; hacia la naturaleza en retorno a la madre, lo atrae el más íntimo deseo: entre ambos poderes vacila su vida temblando de miedo»

Descarga el libro completo: http://geniomaligno.com.ar/scripts/PafileDB/index.php?act=view&id=125

Para Twitter: http://www.twoak.com/aahb & http://www.twoak.com/bibf

¡Saludos!

Martín Dupá

Semana dedicada a Tagore, Andersen y Maupassant

3 Ago

Llega ya la séptima en que hemos venido compartiendo nuestro gusto por la literatura y si la pasada tuvo dos autores, esta tiene más de tres a quienes recordaremos gracias a su obra. En especial destacan tres autores que escribieron mucho de lo que aquí nos gusta e interesa por el objetivo del grupo: iniciar lectores. Y uno de los géneros que más sirven para este propósito es el cuento, por ello es un gran gusto presentarles a nuestros celebrados de la semana: Rabindranath Tagore (India: 1861-1941), Guy de Maupassant (Francia: 1850-1893) y Hans Christian Andersen (Dinamarca: 1805-1875).

Quedan todavía por mencionar: James Baldwin (Nueva York: 1924 -1987), Isabel Allende (Perú: 1942), William Seward Burroughs (Saint Louis: 1914-1997), Joseph Conrad (Ucrania: 1857-1924), Aleksandr Isáyevich Solzhenitsyn (Rusia: 1918-2008) y Rosario Castellanos (México: 1925-1974).

De todos ellos incluyendo a los tres primeros dejo aquí los enlaces en Wikipedia:

http://es.wikipedia.org/wiki/James_Baldwin
http://es.wikipedia.org/wiki/Isabel_Allende
http://es.wikipedia.org/wiki/William_Burroughs
http://es.wikipedia.org/wiki/Joseph_Conrad
http://es.wikipedia.org/wiki/Aleksandr_Solzhenitsyn
http://es.wikipedia.org/wiki/Hans_Christian_Andersen
http://es.wikipedia.org/wiki/Guy_de_Maupassant
http://es.wikipedia.org/wiki/Rosario_Castellanos
http://es.wikipedia.org/wiki/Rabindranath_Tagore

Cabe mencionar cual ha sido el método de elección. Todos los autores que tenemos son recordados porque en esta semana es su onomástico o fecha de defunción (no encontré antónimo para onomástico) y ese ha sido el criterio para elegirlos.

Basado en el cuento de Hans Christian Andersen “La niña de los fósforos”:

Escucha de Guy de Maupassant «El miedo» en audiolibro:

http://albalearning.com/audiolibros/maupassant/elmiedo-sp.html

Y para su descarga en mp3:

http://www.archive.org/download/algdmem/albalearning-elmiedo_maupassant.mp3

Y por último un cuento de Rabindranath Tagore en texto pues no encontré un buen video o audio:

El cartero malo

Madre, di, ¿por qué estás tan callada y tan triste, sentada ahí, en el suelo? ¿No ves que la lluvia entra por la ventana y que te está mojando?

Oye, el gong está dando las cuatro y hermano tiene que volver ya del colegio. ¿Qué té pasa, di madre, por qué estás tan rara? ¿Es que no has tenido hoy carta de papá?

A todo el pueblo le trajo hoy el cartero una carta, yo lo he visto.

Sólo las cartas de papá se las guarda en un saco para leérselas él.

¡Madre! ¡Estoy seguro de que el cartero es muy malo!… Pero no estés triste por eso, madre. Mira, mañana es la feria del pueblo. Que vaya la criada y compre plumas y papel. Yo mismo te voy a escribir todas las cartas de papá. Y verás que no encuentras ni una falta.

Te escribiré derechito desde la A hasta la K… ¿Por qué te estás riendo, madre?

¿Tú crees que yo no sé escribir tan bien como papá?

Ya verás, yo rayaré el papel con una regla, y pondré mucho cuidado, y haré bien grandes las letras.

Y cuando concluya, ¿piensas que voy a ser tonto como papá, que echa las cartas en el saco de ese cartero feo?

¡Te la traeré yo mismo al momento y te ayudaré a deletrearla! ¡Ya sé que al cartero no le gusta darte las cartas más buenas!

FIN

***

Semana dedicada a Tagore, Andersen y Maupassant

Enlaces para Twitter: http://www.twoak.com/icda & http://www.twoak.com/bzad

Esto es lo que tenemos para esta semana más lo que ustedes vayan compartiendo en el grupo.

Martín Dupá

Enlace recomendado:

http://imaginarseasisifofeliz.wordpress.com/2010/06/27/el-administrador-de-correos-rabindranath-tagore-1891/